Historia de Neslihan Ozcan Sahin: Después de toda su lucha, una profesora refugiada comienza a enseñar de nuevo

Escrito por Georgette Schönberger

Neslihan es una refugiada de Turquía que llegó a los Países Bajos para construir una nueva vida con su esposo y dos hijos.

En agosto de 2018, Neslihan dejó su vida en Turquía y huyó a Grecia. Allí pasó tres meses antes de venir a los Países Bajos. Ha vivido con su familia en viviendas sociales en Amstelveen durante algunos años. Vivió con su familia durante 19 meses en diferentes AZCs en los Países Bajos. “Conozco los Países Bajos mejor que un holandés promedio”, afirma Neslihan.

En Turquía, Neslihan trabajó durante mucho tiempo como profesora de química, física y biología. Estaba ansiosa por empezar a enseñar de nuevo cuando llegó a los Países Bajos. Afortunadamente, encontrar trabajo no fue difícil. A través del proyecto “Statushouders voor de Klas”, aprendió cómo funciona el sistema escolar holandés, lo que finalmente la ayudó a conseguir una pasantía. Además, Neslihan ha trabajado como voluntaria en una escuela. Allí trabajó como asistente de enseñanza técnica en la escuela secundaria Apollo en Ámsterdam. En la misma escuela, pudo crecer y, después de un tiempo, también se le permitió enseñar dos días a la semana. El próximo año solo enseñará y ya no trabajará como asistente.

¿Por qué decidiste convertirte en profesora en su momento?

“Disfruto enseñando; no lo veo como un trabajo porque es una pasión mía”. Lleva 18 años enseñando y todavía le gusta mucho. Después de completar su educación, comenzó a enseñar de inmediato. Eligio ser profesora de química, física y biología porque tenía las calificaciones más altas en estas tres materias y le parecían temas divertidos.

¿Por qué decidiste venir a los Países Bajos?

“Leímos en Internet y las noticias y a menudo escuchamos que en los Países Bajos, las personas son libres y pueden compartir sus opiniones o ideas. Desafortunadamente, esto no es así en Turquía, donde no eres libre y no puedes decir lo que quieres. Incluso los niños a menudo van a la cárcel por revelar sus opiniones”. Por esta razón, el hermano y la hermana de Neslihan también vinieron a los Países Bajos con sus familias. Neslihan ve a su familia cada semana.

¿Qué desafíos enfrentaste cuando llegaste a los Países Bajos?

Neslihan es una refugiada política y era considerada una terrorista en su propio país debido a sus opiniones. Toda su familia tuvo que huir de Turquía en barco. El viaje para llegar a los Países Bajos fue intenso. Tuvo que pagar mucho dinero y negociar con traficantes de personas, lo cual puede ser bastante peligroso.

Además, Neslihan quería aprender holandés; esto fue bastante difícil al principio. Como no estaba obligada a integrarse entonces, no pudo tomar un curso de holandés gratuito durante su estancia en el AZC. Sin embargo, aprendió algo de holandés de amigos y voluntarios en el AZC. Por esto, está muy agradecida. Neslihan quería integrarse y asimilarse, por lo que la comprensión del idioma era fundamental. Después de una larga lucha, finalmente logró pedir prestado dinero con el cual pudo tomar un curso.

Ocasionalmente todavía tiene problemas con el idioma holandés, especialmente con ‘er’ más las diferentes preposiciones que encuentra difíciles. Además, todavía no entiende ciertas expresiones holandesas, pero cree que eventualmente lo logrará.

¿Cuáles son las diferencias entre los sistemas escolares turcos y holandeses?

“No hay muchas diferencias, creo. Por supuesto, algunas cosas son bastante similares. Por ejemplo, los adolescentes son simplemente adolescentes y se comportan de la misma manera en ciertos aspectos, pero los estudiantes en los Países Bajos siempre tienen la oportunidad de avanzar debido a los diferentes niveles escolares. Por lo tanto, el sistema en los Países Bajos es mejor porque esa oportunidad está disponible”. Neslihan explica que en Turquía solo hay un nivel y que cada estudiante tiene que aprender las mismas materias y hacer el mismo examen. Entonces, si este nivel es demasiado alto, no tienes otra opción para continuar estudiando, por lo que muchos jóvenes abandonan la escuela.

Otra gran diferencia es que hay poca jerarquía en los Países Bajos. “Mi director y mi líder de equipo son simplemente mis colegas. Somos vistos como iguales y tratados de la misma manera. Puedo llamarlos por su nombre. En Turquía, tienes que dirigirte a todos como señor o señora. No quiero más jerarquía en Turquía; me gustaría cambiar eso”.

¿Hay algo que te gustaría compartir?

“Me gustaría decir que todos somos personas que podemos vivir juntas; solo tienes que tener respeto por los demás. Debes tratar a todos con respeto y crear un ambiente seguro y agradable. Vinimos aquí por nuestra libertad, y Holanda nos ha dado muchos derechos. Por lo tanto, tienes que hacer algo por los Países Bajos; tienes que usar tus habilidades para ayudar aquí, para integrarte. Dar ese primer paso es fácil: saludar a tus vecinos, por ejemplo, o simplemente charlar con alguien y ser amable”.

Neslihan también quería recordar a todos que muchas personas todavía están amenazadas en Turquía o olvidadas en la cárcel. Siempre puedes hacer algo por ellas, por ejemplo, compartiendo algo en Twitter o hablando de ello.

Traducido por Daniel Ordoñez del original Story of Neslihan Ozcan Sahin: After all her struggle, a refugee teacher begins to teach again.

Comunicado de prensa: DÍA DE LOS DERECHOS HUMANOS 2022

10 de diciembre de 2022

Comunicado de prensa: DÍA DE LOS DERECHOS HUMANOS 2022

“Facilitar el derecho a la educación contribuirá a facilitar otros derechos humanos”

 

Este 10 de diciembre, Broken Chalk desea no sólo celebrar el 74 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, sino también reflexionar sobre los numerosos retos y éxitos a los que se ha enfrentado la comunidad de derechos humanos este año. Como siempre, la misión actual de Broken Chalk es difundir la importancia de la educación en la realización de los derechos humanos. A pesar de la multiplicidad de avances en materia de derechos humanos en todo el mundo, la pobreza, la violencia sistemática e institucional, la discriminación y la corrupción siguen impidiendo que los niños y los adultos jóvenes ejerzan plenamente su derecho a la educación. Al comenzar el año 2023, merece la pena considerar qué políticas deberían adoptar las naciones y la comunidad internacional para fomentar una educación de calidad accesible para todos.

En 2022, uno de los mayores obstáculos que impedían dicha educación seguía siendo la financiación. Los centros educativos de todo el mundo siguen careciendo de infraestructuras seguras, agua potable, suministros suficientes, libros y otros materiales didácticos. A los educadores rara vez se les paga un salario digno, a pesar de realizar una de las labores más esenciales de una sociedad. Esta crisis de financiación se agrava a medida que crece la inflación mundial. A medida que la economía decae, los gobiernos ajustan los presupuestos educativos, reduciendo aún más la calidad de la educación impartida. Al mismo tiempo, las familias necesitan más ingresos, de ahí que cada vez más niños abandonen la escuela para trabajar. Estos dos hechos se refuerzan mutuamente; si la calidad de la educación que recibe un niño disminuye, es más probable que las familias que efectúan un análisis coste-beneficio den prioridad al trabajo sobre la escuela porque trabajar presenta un valor más inmediato. Esto puede tener efectos duraderos; una mano de obra sin educación puede reducir los salarios para todos, ampliando las desigualdades de ingresos y exacerbando la pobreza. Para evitar este círculo vicioso, debemos recordar a nuestros responsables políticos —nacionales e internacionales— que la educación es un derecho humano esencial al que deben asignarse fondos suficientes.

Otro problema al que se enfrenta la educación accesible y de calidad, es la creciente prevalencia de los conflictos internos. Debido a las injustas prácticas de aplicación de la ley empleadas por el actual gobierno de Turquía, los profesores se han visto expuestos a la tortura, han sido encarcelados y han perdido la vida. Entre la violencia en Irán, los repetidos golpes de Estado en Burkina Faso, la invasión de Ucrania, la cristalización del poder de los talibanes en Afganistán y los conflictos en curso en Etiopía, Siria, Yemen, Myanmar y muchos otros, 2022 no puso fin a muchas de las disputas más agudas del mundo. En las zonas de conflicto, el cumplimiento del derecho humano a la educación se enfrenta a retos casi insuperables. La amenaza constante de la violencia, impide a la educación tener un lugar en absoluto, especialmente si se tiene en cuenta las instalaciones educativas son con frecuencia objetivo de los grupos armados insurgentes. Las familias sufren grandes pérdidas que van desde la pérdida de la vida, de miembros de la familia, de ingresos y/o del hogar, e incluso pueden convertirse en refugiados o desplazados internos. La consolidación de los esfuerzos de ayuda humanitaria es esencial para garantizar que se sigan prestando algunos servicios educativos básicos incluso durante los conflictos. En muchos sentidos, la educación es una medicina eficaz para prevenir los conflictos antes de que se produzcan y tratar las consecuencias sociales de los conflictos después de que se produzcan. La educación es fundamental para construir la cohesión social y ofrece una salida no violenta para expresar y promover objetivos políticos. En las sociedades con mayor riesgo de conflicto, una educación específica que ayude a las minorías sociales, políticas y étnicas puede prevenir la violencia. Si se produce un conflicto en una sociedad, la educación a posteriori puede colmar las lagunas de desarrollo dejadas por las poblaciones desplazadas, ayudando a restablecer la economía de una sociedad. La educación después del conflicto también puede ayudar a quienes se han visto afectados negativamente por el conflicto, especialmente a quienes han perdido la vida, la familia o el hogar; la educación puede proporcionar las herramientas para la resiliencia y nuevas y mejores oportunidades. Por último, la educación en derechos humanos puede reintegrar a los excombatientes, enseñándoles el error de su conducta violenta y reconfortar a las antiguas víctimas, enseñándoles a apreciar su importancia como seres humanos.

Un último reto al que sigue enfrentándose la educación son los continuos trastornos causados por la pandemia del COVID-19. Los estudiantes más afectados por el aprendizaje digital, incluidos los niños pequeños y los que no pueden permitirse Internet o la tecnología digital, siguen quedándose rezagados en la escuela. Debemos evitar lo que cada vez más se denomina una “crisis mundial del aprendizaje”, ya que los niños no reciben la calidad de educación que se ofrecía antes de la pandemia COVID-19 y las escuelas no logran adaptarse a las exigencias cambiantes del siglo XXI. Los responsables políticos nacionales e internacionales deben recabar la opinión de las escuelas y las familias para saber cómo puede cambiar la política educativa en la era digital, y cómo la digitalización puede incorporar a estudiantes de todos los orígenes y necesidades de aprendizaje.

En el 2023, Broken Chalk se centrará en estas cuestiones, además de en otras. Es importante recordar en este Día Internacional de los Derechos Humanos que todos los derechos humanos están interconectados y se generan mutuamente; facilitar el derecho a la educación ayudará a facilitar otros derechos humanos, como el derecho a la vida, a la igualdad ante la ley, a la intimidad, a la propiedad, a la libertad de pensamiento, conciencia y religión, a la libertad de opinión y expresión, y otros más. Recíprocamente, los avances en otros derechos humanos repercutirán positivamente en la educación.

Broken Chalk se compromete a que este nuevo año nos esforzaremos por promover todos los derechos humanos elevando el derecho a la educación.

 

 Firmado por

Broken Chalk

 

Translated by Daniel Ordoñez, from Press Release: HUMAN RIGHTS DAY 2022 – Broken Chalk